EN ARGENTINA UNA CADENA DE SUPERMERCADOS TUVO LA INICIATIVA HACE TRES AÑOS Y AHORA SE CONVIRTIÓ EN ORDENANZA EN DISTINTOS MUNICIPIOS Y EN SANTA FE EXISTE UN PROYECTO PARA QUE SEA LEY PROVINCIAL. ESTA MEDIDA CONSISTE EN BAJAR LA INTENSIDAD DE LAS LUCES Y LOS RUIDOS EN LOCALES COMERCIALES DURANTE SESENTA MINUTOS Y ASÍ COLABORAR CON QUIENES TIENEN UNA GRAN SENSIBILIDAD A ESTOS ESTÍMULOS, COMO LAS PERSONAS EN EL ESPECTRO AUTISTA.

“Hay personas autistas que ante la profusión de estímulos sufren lo que se conoce como sobrecarga sensorial: acumulan estresores hasta que explotan en una crisis conductual o de ansiedad”, describe Cadaveira, psicólogo y autor especializado en el espectro autista. “Esto explica por qué, por ejemplo, un niño con autismo está tranquilo y de golpe hace un berrinche en el supermercado”, explica.

Anabel, la mamá de Bruno quien fue diagnosticado en el espectro autista, lo describe así: “El supermercado es muchas veces un ambiente sobrecargado de estímulos, luces, sonidos, imágenes, mucha gente. Puede ser muy abrumador”.

Durante un año, Carrefour recopiló experiencias y trabajó en el Programa La Hora Silenciosa. Tras consultar con padres de niños en el espectro autista por los mejores horarios para implementarlo, resolvió que durante dos horas por semana, una a la mañana y una a la tarde, los locales de la cadena pondrían luces tenues y evitarían los sonidos del altoparlante.

“El modelo acá fue muy bien recibido. Carrefour Francia lo replicó este año”, señala Yamila Scollo, gerenta de Sustentabilidad y RSE de Carrefour.

Un aspecto fundamental de este tipo de iniciativas es que vayan acompañadas de la capacitación del personal, porque el factor humano juega un rol clave en la inclusión. “Es importante darles [a las personas autistas] el tiempo que necesitan para procesar la información en la comunicación, verbal o no verbal. Pueden requerir un sistema alternativo de comunicación o que se les hable en un lenguaje claro y con paciencia. A veces, ayuda en cuestiones de motricidad fina, como embolsar artículos”, explica Anabel. Los empleados de Carrefour recibieron formación en ese sentido.

Foto de un niño autista junto a su madre en un suepermercado

Una solución que puede replicarse

El de Carrefour no es el único caso. La acción de reducir estímulos en locales o espacios que reúnan mucha gente es conocida en Europa. La aplicó, por ejemplo, la cadena de supermercados británica Morrisons, la holandesa Albert Heijn y, también, se implementa en la Feria de Abril de Sevilla.

En Argentina, desde hace años se realiza lo que que se conoce como “función distendida” en el cine o teatro, en la que se ofrece el espectáculo con sonidos menos intensos o sin apagar todas las luces porque la oscuridad también puede inquietar.

¿Te gustaría que esta medida se replique en Chile?

Fuente: infobae.com