PATRICIO (47), FUE DIAGNOSTICADO HACE 24 AÑOS CON TRASTORNO DE BIPOLARIDAD SEVERO. HACE UNOS DÍAS, LUEGO DE SUFRIR UNA DESCOMPENSACIÓN, FUE LLEVADO A TRIBUNALES Y DESDE ALLÍ SE DETERMINÓ SU INTERNACIÓN EN EL HOSPITAL PSIQUIÁTRICO HORWITZ, PERO POR FALTA DE CUPO, FUE INGRESADO A SANTIAGO 1 DONDE SUFRIÓ UNA AGRESIÓN SEXUAL QUE CASI LE COSTÓ LA VIDA.

Una carpeta con una serie de antecedentes y negligencias de distintas instituciones del Estado evidencian el grave error con un hombre con una discapacidad mental y que ha sufrido diversas de violaciones a sus derechos fundamentales.

Patricio es un diseñador gráfico de 47 años, a los 23 se le diagnosticó un trastorno de bipolaridad severo que lo mantiene con un 87% de discapacidad mental. El 8 de septiembre sufrió una descompensación que derivó en una crisis psicótica y autoagresiones severas, y ante la ausencia de ambulancias psiquiátricas públicas y los altos costos del sistema privado (cerca de $600.000 el costo de un ambulancia siquiátrica privada), su madre decidió llamar a Carabineros.

Tras interponer una denuncia por amenazas simples (se debe interponer una denuncia para que Carabineros pueda hacer algo) Patricio es puesto a disposición de tribunales, instancia en que el juez ordenó su internación en el Instituto Psiquiátrico Horwitz, pero las camas estaban colapsadas y la lista de espera era interminable.

El 11 de septiembre es ingresado como un delincuente más a la cárcel de Santiago, y a los tres días, sufrió un abuso sexual grave que lo mantuvo al borde de la muerte, siendo internado de urgencia en el Hospital San José.

Tras 35 días en prisión preventiva, Patricio salió en libertad y presentando evidentes síntomas de un shock séptico por la infección de sus lesiones que fue constatada por el Cesfam de La Florida. Insólitamente, ningún centro de salud pública estaba preparado para atenderlo.

Su hermana detalló que: “A cualquier hospital siquiátrico que fuéramos y decíamos que tenía lesiones, nos decían que ellos solo veían el tema mental y no físico. Y en cualquier hospital regular, nos decían que no atendían a pacientes siquiátricos”.

Actualmente Patricio está siendo tratado por el Hospital de La Florida tras quedar libre, pero una vez dado de alta deberá seguir esperando por una cama psiquiátrica que en el sistema público será difícil de conseguir. La otra opción que le queda a la familia, es buscar una cama psiquiátrica en el sector privado, la que en el mejor de los casos, las sumas ascienden a $250.000.

Ahora la familia comenzará un proceso judicial para enfrentar a las instituciones del Estado que han sido negligentes con los derechos fundamentales de un paciente psiquiátrico, mientras también esperan los informes del sistema judicial que falló en la protección de este hombre.

Un indignante caso que demuestra que nuestro país está muy atrasado en temas de salud mental, y que las personas en situación de discapacidad siguen siendo estigmatizadas y excluidas debido a la ignorancia, a la falta de protocolos especialmente en instituciones públicas, y a un casi nulo trabajo del Estado por velar por sus derechos fundamentales.

Fuente: chvnoticias.cl